Hoy no queremos hablarte de nuestra residencia para mayores y ancianos en Teo sino que queremos dedicar este post a aquellas personas que tienen que tomar la difícil decisión de ingresar a alguno de sus familiares en ella. Somos conscientes de que se trata de un momento muy duro en el que el sentimiento de culpa está demasiado presente, por eso en estas líneas queremos compartir algunas razones para que las personas que estén en esta tesitura, dejen de sentirse así.

Si tus padres y abuelos te dedicaron toda su atención cuando eras pequeño, sentirse mal por no poder corresponderles ahora es un sentimiento totalmente normal. Sin embargo, a lo largo de nuestra amplia trayectoria como residencia para mayores y ancianos en Teo hemos podido comprobar cómo muchas personas que se sintieron culpables en un primer momento, en seguida fueron conscientes de que la decisión que habían tomado era la más acertada.

En primer lugar, piensa que las personas mayores requieren de una atención continua y, en muchas ocasiones, especializada que tú no puedes brindarles. En este sentido, solo en un centro geriátrico serán atendidos por un equipo de profesionales médicos, enfermeros, psicólogos, fisioterapeutas... que cuidarán en cualquier momento y ante cualquier urgencia.

Por otro lado, cuidar a una persona de la tercera edad suele provocar un desgaste personal importante que muchos hijos sufren. Acciones tan cotidianas como ir al cine o salir a cenar fuera resultan un imposible, generándose una sensación de estrés cada vez mayor que puede desencadenar conflictos con la pareja o entre hermanos. En definitiva, algo que puede evitarse de llevar a los mayores a una residencia como la nuestra en la que además de estar atendidos por profesionales, disfrutarán de un entorno agradable con la compañía de otras personas de su edad.

En Residencia O Castro podemos asegurarte que, lo mires por donde lo mires, la mejor decisión que puedes tomar pensando en el bienestar de tus mayores, es alojarlos en una residencia como esta.